lunes, 26 de julio de 2010

Callejeros montevideanos: Chayber 5000

En la entrega anterior conté el proceso por el cual se llegó a la exposición que hoy se puede disfrutar en el Subte Municipal: el Chayber 5000. Hoy voy a contar el proceso por el cual llegué a mi propuesta.

Cuando Gerardo me mandó un correo proponiendo la participación en el Chayber coincidió en que hacía algunos días había encontrado una "cantera" de papeles afiches no explotada. Hasta ahora yo siempre que necesitaba mi soporte de papeles afiches recurría a un muro de la calle Colonia en la cual los papeles se iban acumulando hasta formar una capa interesante para trabajar. El tema es que mi cantera era como un fruto que hay que ir esperando que madure antes de comerlo. Cada tanto yo pasaba y estudiaba la situación de mis frutos y planificaba para cuando sería la cosecha. La última vez que pasé me llevé la triste sorpresa que alguien había decidido limpiar el muro. Por lo cual de golpe, todo el tiempo de espera había sido inútil. En eso estaba en esos días previos al anuncio de Gerardo, cuando una mañana, desde la ventanilla del ómnibus divisé una cantera totalmente virgen y añeja.

Fue entonces que al recibir la invitación pensé, como mi amiga Marília, "Tudo fecha!" y salí con mi trincheta a recolectar capas tectónicas de papel afiche. Estaba en esa tarea cuando dos niños del lugar se acercaron y estuvimos discutiendo sobre el porqué de mi labor y algunas otras cosas que hacen a la esencia misma de la vida.

La idea fue reproducir una exposición de cuadros, como las que se ven en galerías, pero en la calle. Devolver a la calle aquello que le había sido extraído, pero devolverlo transformado por el arte. Transformar la publicidad callejera del papel afiche, en arte urbano. Cada cuadrito debía ir acompañado de su cartel indicativo como ocurre en las exposiciones. La serie se llamó: 15 cuadros para una exposición y cada cuadro tenía un título. El título de cada cuadro fue un plagio o tal vez una tarea de pescador. Como en esos juegos de niños en que se pesca con imanes, me dediqué a pescar de versos de Idea Vilariño combinaciones de palabras que inspiraran un cuadro. La misma metodología empleada en el urgar en las capas de papel (se van desvelando algunas imágenes, colores, del pasado y dejando otras cubiertas) la usé a nivel de la lectura de los versos. No leía el poema, sino que buscaba que la mirada iluminara alguna frase, o menos aún: un para de palabras.

El resultado de esta tarea de urgador semántico, es lo que pueden ver en las fotos de abajo.


















En general las exposiciones suelen tener un libro donde los visitantes dejan sus comentarios al artista. En este caso, el libro no fue previsto. Pero ocurrió algo insólito e inesperado. Uno de los más antiguos seguidores de este blog, que aparte de tener un blog super interesante, es mi primo, me mandó el siguiente correo que lo dejo como anotación en el libro virtual de mi exposición callejera. Su correo decía así:

"Grande fue mi emoción al identificar la obra "Mi Pavor" expuesta en las inexpugnables alturas del tobogán de hormigón cercano a la embajada de EEUU. Como padre, le estoy muy agradecido por exponer su arte a los niños. También disfruté que lo hiciera fuera del alcance de los padres, para evitar la contaminación del sentido artístico del párvulo. Allí en las alturas estaba su obra, y no hubiera sabido de su existencia si no fuera porque mi pequeña sufre de vértigo y me solicitó asistencia en su escalada. Si lamenté mucho no haber llevado la cámara de fotos, ni siquiera el miserable celular, para testimoniar mi participación en semejante acto cultural.
Día y hora del avistamiento: domingo 4 de julio, 13:30 horas.
Estado de la obra: inmaculado.
En el cuadrito hablaba de una exposición mayor, estaré atento a descubrir otras obras escondidas por la ciudad.

Un abrazo."


Abajo verán la obra Mi Pavor a la cual hace referencia Edmundo.

3 comentarios:

  1. CHE ES RE ORIGINAL--

    HAY QUE HACER UNA MOVIDA EN BUENOS AIRES

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  2. fue una idea genial, te confieso que desde que descubrí este arte gracias a vos, estoy mucho mas atento a los detalles en paredes y columnas. Es como si te probaras lentes nuevos y descubrieras que antes estabas usando la receta equivocada, y lo que antes era ruido de fondo ahora tiene una textura muy rica y diverdida.

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