domingo, 9 de mayo de 2010

Librito Abengoa

Desde hace tiempo regularmente recibo libritos por correo. No conozco a quién me los manda, llegan sin una nota explicativa que deje intuir la razón de tan delicado envío. De la misma forma que otros libros hablan de la vida, estos hablan de Empresas. Así como en las novelas los escritores se esfuerzan por hacer tangibles a sus personajes, en estos libritos se esfuerzan por colorear números. De esta forma, mis libritos cuentan maravillosas historias de empresas triunfantes en medio de la crisis más importante de los últimos 80 años del capitalismo.

Mis libritos son hechos en hermosos papeles brillantes. Confieso que no los he leído, no al menos como se leen los libros. Los he leído como quien lee un cuadro. Rescatando frases, palabras, letras, del contexto global. Mis libritos tienen muchas fotos, hermosas fotos del mundo empresarial. Mis libritos hablan inglés y español, pero hubiese sido igual si hablasen mandarín.

He decidido ponerle vida a mis libritos, poblarlos de personajes con problemas menos acuciantes y con respuestas menos exitosas. En este librito de la empresa Abengoa, mis personajes conviven entre el inglés lunfardo y el español nuestro de cada día. El destino de mis personajes era terminar en la calle como en anteriores libritos. Pero de algún modo, aprovecharon el caos circundante y se me han escondido. En cuanto los encuentre los saco de patitas a la calle, pero mientras tanto los cuelgo aquí en la calle de aire, o la calle sin aire, que es internet.

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